Según un artículo del NY Post, Siri, el bot que puede programar tus citas con el médico, comprar tus entradas para conciertos y decirte la altura de la torre Eiffel, es objeto de "acoso sexual" a diario. Al parecer, a los "bots" como Siri se les hacen muy a menudo preguntas sexuales inapropiadas. Un portavoz de Cortana (la versión de Microsoft de Siri) explicó que muchas de sus primeras preguntas también eran sexualmente explícitas.
El autor del artículo decidió decir algo de contenido sexual a varios "bots" para ver qué pasaba. Los resultados están a continuación:
Consiguió mantenerse neutral (y vaga) al responder a su flagrante acoso, pero en ocasiones personalizó su respuesta con su nombre de pila, "el uso de mi nombre al final de la bofetada añadió un nivel de personalización que escocía).
Cuando le preguntó si podía acostarse con Alexa, respondió con un "cambiemos de tema". Directo y al grano.
Ni siquiera reconoció la pregunta y en su lugar le envió a una búsqueda porno.
¿Se trata sólo de una broma hacia un ordenador que debe ignorarse? Si no es así, ¿cómo deberían establecer los programadores de estos bots las respuestas a preguntas sexuales inapropiadas?